Actualidad Política y Cultural - Blog de Rafael Silva

¿Cómo podríamos calificar al Gobierno de la Generalitat de Cataluña? Creo que no tengo palabras. ¿Cómo se califica a un Gobierno que lleva a cabo estas prácticas? Simplemente, el Gobierno catalán de CIU no tiene nombre. Vamos a los hechos, para que los lectores se puedan situar en el contexto: 

1.- Planteamiento. Por citar un antecedente de referencia, en el cual dicen ellos (el Gobierno catalán) que se basan, parece ser que existe una Ley aprobada en 2006, durante la época del anterior Gobierno (ése al que CIU llamaba despectivamente "tripartito") según la cual toda persona que esté ingresada de forma temporal o permanente en un centro público (ya sea sanitario, residencial o penitenciario) no tiene derecho a pensión pública alguna, ya que en dicho centro dispone de cama y comida, y por tanto, no necesita la pensión. La Ley ya de por sí es tremendamente cruel, discriminatoria, antisocial...pero ésas tenemos. Con el cambio de Gobierno, dicha  Ley no se deroga, ni se corrige, ni se actualiza, ni se modifica, más bien al contrario, el Gobierno de CIU (que tiene tripas sin estrenar) la hace suya en cuanto entiende que se dan casos que puedan cuadrar en esta casuística.

2.- Nudo. Existe una pareja de ancianos catalanes, Sigfrido y Trinidad, que viven de alquiler, y disponen de los siguientes ingresos: él dispone de una paga de 570 euros (de la que tiene que descontar 215 euros para pagar el alquiler de su vivienda), y ella dispone de una pensión no contributiva de 104 euros. Resulta que el día de Navidad pasado ella (de 84 años) sufre un ictus, por lo cual está ingresada durante un tiempo en un hospital, y cuando se recupera (no del todo aún, claro está) necesita ingresar en un centro público para proceder a un proceso de rehabilitación de varios meses de duración. Pues bien, durante su estancia en dicho centro socio sanitario, recibe una carta de la Generalitat catalana comunicándole que le retiran su pensión porque está recibiendo atención en dicho centro (comida y alojamiento), y por tanto, en cumplimiento de la Ley anteriormente citada, no necesita la pensión. No contentos con esto, la Generalitat también le obliga a devolver los 208 euros de las dos últimas mensualidades cobradas, correspondientes a los meses de junio y julio.

3.- Desenlace. El marido de la anciana, operado dos veces de cáncer, denunció esta decisión, y pidió a la Generalitat que le dejara pagar la deuda por mensualidades de 10 euros. Este señor admitió en entrevista radiofónica que su situación económica es muy difícil, ya que a los gastos de alquiler se le suman el resto de gastos, y se ha tenido que limitar a comer una sola vez al día. En cuanto se conoció la noticia, socios de algunas organizaciones benéficas y de varias ONG's procedieron a una colecta para poder ayudar a esta pareja de ancianos a poder salir adelante. Por su parte, el Consejero de Bienestar Social, Josep Lluis Cleries, calificó este tipo de decisiones como "molestas", pero apoyó la decisión del Gobierno y advirtió que el matrimonio no tiene más opción que cumplir con la Ley. Según Cleries, "la Generalitat no puede pagar dos prestaciones a la vez para un mismo beneficiario, porque si no, nos lo podrían reclamar todos los demás que no la reciben". Asímismo, el Consejero argumentó que una Administración debe dar cuenta de que "el dinero que recibimos lo gastamos bien".

Así están las cosas. Y creo que poco más se puede decir. Juzguen ustedes la tremenda crueldad de que hace gala este Gobierno catalán, que no puede caer más bajo, ni ser más rastrero ni más indigno, ni más antisocial, ni más despótico, ni más inhumano, ni más insensible socialmente. Creo que el Gobierno de CIU ha batido todos los récords de indignidad que un Gobierno puede practicar con sus ciudadanos. Ha perdido todas las papeletas, toda la credibilidad que podía quedarle. Hace pocos meses, retiró hasta el derecho a merienda para los reclusos de las cárceles catalanas. Cuando la ciudadanía se levante contra él, que se levantará, sólo le quedará cargar contra el pueblo como está haciendo desde el principio, desde las primeras manifestaciones populares. Comportarse como un Gobierno represor, la última defensa que le queda a todo Gobierno tiránico contra su propio pueblo. Al tiempo.