"El poder es incapaz de cumplir sus propias Leyes y la Constitución, y esa es la brecha por la que las mayorías sociales pueden entrar a impulsar un cambio democrático"
(Julio Anguita)
Abordaremos en la presente entrega los MS que puedan estar clasificados por su carácter cívico, o político, es decir, próximos al activismo político, o a la defensa de los valores éticos, cívicos, o de justicia social, lo cual nos abre un abanico muy amplio. Dentro de los mismos podemos incluir también aquéllos que demandan otras estructuras civiles y políticas, otras transformaciones ciudadanas, u otras reivindicaciones sociales, como pueden ser los movimientos republicanos, o memorialistas, en los cuales profundizaremos en siguientes artículos. Excluimos de esta lista expresamente a las nuevas formaciones políticas que se puedan estar formando, tales como VOX (a la derecha del PP, y liderada por José Antonio Ortega Lara), o la Plataforma "Podemos" de Pablo Iglesias, a la que hemos dedicado recientemente un artículo, que representan otro tipo de movimientos más ligados a la consecución de objetivos políticos. No obstante, hay que señalar que la estructura y organización de los MS en España, de un lustro hacia acá, está experimentando grandes cambios.
En palabras de Manuel Cañada: "Está surgiendo un nuevo movimiento obrero, un movimiento obrero de nuevo tipo. Movimiento obrero, como sabían los viejos militantes, es un término que va más allá del sindicalismo. Las Plataformas de Afectados por las Hipotecas (PAH), los Campamentos Dignidad o las Mareas en defensa de lo público son, en gran medida, formas de expresión de ese nuevo movimiento obrero, que surge exigiendo alquileres sociales en las puertas de los bancos, renta básica en las oficinas de empleo o tarifa social para el transporte público. Es un nuevo movimiento obrero que se afana por nacer fuera o en la frontera de los centros de trabajo. Pero también en el interior de las empresas están surgiendo nuevas formas de lucha o se rescatan con decisión otras que aparecían como anacrónicas o poco razonables, como la huelga indefinida. Si hace dos años, nos hubieran dicho que los maestros de Baleares, los barrenderos de Madrid, los trabajadores del alumbrado o los de empresas como Panrico harían un uso resuelto de esa herramienta no nos lo habríamos creído. Abramos bien los ojos y, sobre todo, recorramos con nuestro pueblo los nuevos caminos de lucha".
Y atendiendo a esta nueva demanda social, organización interna y debates asamblearios están sufriendo nuevos cambios para adaptarse a la realidad de una nueva problemática social cada día más vigente. Por ejemplo, están creándose Corralas, Asambleas de Parados y Paradas, Despensas Solidarias, Lunes y Martes al Sol, Roperos Sociales, Marchas de la Dignidad (como la que llegará a Madrid en el mes de marzo), y diversas formas de auto-organización obrera que constituyen en la práctica el embrión de un gran movimiento contra el paro y la precariedad. La lucha por la renta básica y la ILP que la reivindica quieren ser un instrumento más que le dé consistencia y lo fortalezca. Y en esta línea podemos incluir a la nueva Plataforma "Suma, la gente primero". Aunque tiene bastantes connotaciones políticas (pues su intención es presentarse también a las próximas Elecciones Europeas), su carácter social es más que evidente. Se autodefinen como el referente de la convergencia social y de las políticas de izquierdas. Y aunque el abanico de las supuestas formaciones de izquierdas se vaya ampliando, este hecho nunca puede ser negativo, siempre que sea para unificar posturas, para reforzarlas, y para construir un ideario mínimo común que pueda aglutinar las necesidades de los de abajo, y llegar a representar un contrapoder hegemónico.
La Plataforma "Suma, la gente primero" (constituida en julio de 2013) es el nuevo nombre que se le ha dado a esta organización ciudadana, después de su IV Asamblea General celebrada en Madrid, y que reunió a más de 30 organizaciones políticas y sociales. Su programa se abrirá a la participación ciudadana a través de Internet y en los diferentes foros por todo el Estado, en un proceso programático en continuo crecimiento y realimentación. Esta Plataforma está constituida por multitud de Asambleas populares del 15-M, la Asociación Nacional de Desempleados, Colectivo Burbuja, Compromiso La Izquierda, Confederación de Los Verdes, Confluencia, Construyendo La Izquierda-Alternativa Socialista (CLI-AS), Convergencia por Extremadura, Convocatoria Cívica, Cooperación por la Renta Básica y el Reparto del Trabajo, Corriente Marxista Revolucionaria "El Militante", Canarias por la Izquierda, Ezker Batua-Berdeak, Fundación CEPS, Iniciativa Socialista de Izquierdas (ISI), Izquierda Abierta, Izquierda Anticapitalista (IA), Izquierda Republicana (IR), Izquierda Unida, Movimiento "Yo no pago", Nova Esquerda Galega, Plataforma Ciudadana Ya, Plataforma contra la Impunidad del Franquismo (a la que le dedicaremos más atención cuando hablemos de los MS memorialistas), Plataforma por el Respeto Social, Plataforma de Ciudadanos por la República, Primavera Andaluza, Sindicato de Estudiantes (SE), Socialismo 21, o Unidad Cívica por la República (los MS republicanos también serán expuestos más a fondo en su momento).
Y en cuanto a las Convocatorias Sociales y Movimientos Cívicos, en orden cronológico, la lista de los principales (tomada de la referencia de Raúl Camargo, de IA), resulta en la siguiente:
1.- Frente Cívico "Somos Mayoría". Liderado por Julio Anguita, fue la primera iniciativa en surgir. Junto a un grupo de personas afines, su extensión ha sido rápida en todo el Estado y su objetivo es construir un programa de mínimos que agrupe a la mayoría de la sociedad en su defensa. Agrupa a varios miles de personas organizadas en Asambleas y grupos locales. Rechaza expresamente la posibilidad de utilizar la vía electoral.
2.- Convocatoria Cívica. Impulsada por un grupo de personalidades, entre las que destacan Baltasar Garzón, Luis García Montero, Almudena Grandes, Federico Mayor Zaragoza, o Teresa Aranguren. Muy cercanos políticamente a la formación Izquierda Abierta (cuyo líder es Gaspar Llamazares), también participa en la Convocatoria Social que mencionamos más adelante.
3.- Procés Constituent. De ámbito exclusivo para Cataluña (véase el artículo titulado "Manifiesto para la Convocatoria de un Proceso Constituyente en Cataluña", para una referencia más amplia), surge como iniciativa de dos personalidades muy reconocidas dentro de la izquierda social catalana: la monja benedictina Teresa Forcades, y el economista Arcadi Oliveres. Es el proceso unitario más potente de todos los citados, superando ya las 50.000 adhesiones, y más de un centenar de Asambleas locales funcionando. Su objetivo es crear una República Catalana "del 99%".
4.- Alternativas desde Abajo. Iniciativa que surge en Madrid a partir de la propuesta realizada por diferentes organizaciones de la izquierda social y política de esta ciudad, para celebrar unas jornadas de debate a escala estatal sobre el tipo de propuestas que deberían defenderse desde una alternativa amplia. Dichas jornadas tuvieron una asistencia aceptable, y las conclusiones de los diferentes talleres demostraron que existía un acuerdo bastante generalizado sobre el programa a defender. Hay procesos en marcha en Alicante, Murcia y Sevilla, y con características parecidas en Aragón, donde se denomina "Convención 3D".
5.- Convocatoria Social. Es la iniciativa propuesta por Izquierda Unida a nivel estatal, para crear un frente ciudadano para impulsar luchas políticas y sociales, y sobre todo, para articular una candidatura electoral de cara a las Elecciones Europeas de mayo del presente año. Ha celebrado ya varias reuniones, siempre abiertas a la participación ciudadana, agrupadas por temáticas, con la participación de diferentes colectivos, pero el proceso está aún bastante indefinido.
En fin, todos estos movimientos, plataformas, iniciativas, etc., poseen un denominador común: despertar una conciencia ciudadana dormida, un malestar social anestesiado por el poder, para poder enfrentarse al mismo de forma mayoritaria, y conseguir, mediante un conjunto de propuestas de mínimos comunes, basadas en el debate entre diferentes, llegar a acuerdos sólidos y generalizados sobre programas, perspectivas de trabajo para conseguirlo y sus métodos, que han de ser siempre radicalmente democráticos, inclusivos y transparentes, que canalicen la indignación popular, para llegar a configurar un contrapoder real que represente una alternativa mayoritaria que pueda enfrentarse a los actuales poderes que nos gobiernan. Continuaremos en siguientes entregas.
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